viernes, 7 de junio de 2013

LA RENDICIÓN DE ALCARAZ



Recreación de la rendición de Alcaraz


Año de 1213 Rey Alfonso VIII ha decidido dirigirse hacia las tierras de Alcaraz.

Estas estan gobernadas por Aben Hamet, según dice estas tierras son la llave al reino de Murcia.

 Los informadores, dicen que es un fiero guerrero y que defenderá la ciudad hasta el final, y aunque es implacable es tambien justo con su pueblo; son grandes dones para un hombre, pero esta en nuestra tierra, es un invasor infiel y debe de ser expulsados de nuestra amada tierra cristiana.



Todo lo que nos contaron, es cierto, son implacables, aun viéndose superados, siguen, presentando batalla, la toma de esta plaza ya se han cobrado mas de dos mil almas y estos malditos infieles se han apostado bien en su fortaleza, ya llevamos mas de un mes y medio de asedio, pero Dios esta con nosotros pronto claudicaran.





Con algunas tropas de refuerzo de Toledo, ha llegado un maestro ingeniero nazarí llamado Abu Isa Ibrahim ibn Abd-Allah, este ha construido una gran torre de asedio, la cual nos facilitara el asalto.







En unos días haremos el asalto, al menos eso es lo que esperamos pues ya llevamos mas de un mes y medio de asedio y los víveres empiezan a escasear……




Malditos moros, mientras dormíamos han asaltado furtivamente la torre de asedio, asesinando a nuestros compañeros e incendiándola.




























Nunca habíamos visto arder tan rápido la madera, parecía que las mismas llamas del infierno fueran devorando la madera, era una imagen dantesca el crepitar de la madera, el olor a carne quemada y el tener que presenciar como las llamas van devorando la carne de esos valerosos cristianos que no pudieron llegar a combatir, no hubo manera humana de apagarla, solo pudimos contemplar tristemente esta gran pila funeraria.




    El Gran Maestre de Santiago Don Pedro Gonzalez, esta decidido a lanzar un ataque, esta afrenta ha de ser castigada, no podemos quedarnos impasibles ante este ataque, mañana con las primeras luces un grupo con él a la cabeza asaltaran la plaza, con un golpe de suerte los cogeremos desprevenidos y podremos abrir brecha.
   



Posiblemente no regresen pero al menos morirán con la espada en la mano y sirviendo a Dios, en la ardua tarea de expulsar a los infieles.








Las silenciosas calles de Alcaraz, pueden estar vacías pero en los rincones mas oscuros hay ojos que acechan, esto desemboco en una emboscada; estaban esperando agazapados en todas las esquinas y recodos que rodeaban la plaza.












Salieron de todos sitios, consiguiendo aislar al Gran Maestre de Santiago.







 Acabando con su vida y con la primera linea de defensa









La segunda linea, acometió contra el frente defensor y consiguieron hacerles retroceder.











Pero con un alto coste, poco a poco las tropas cristianas iban cayendo, lo que iba a ser una rápida maniobra de ataque por sorpresa se estaba convirtiendo en una escaramuza, la voz de alarma ya se había dado hacia varios minutos y los refuerzos que llegarían no serian precisamente cristianos......






Guardias sarracenos se fueron adentrando a la plaza por todas sus calles colindantes rodeando al pequeño grupo cristiano que aun los mantenía a raya.










Lo que trajo, lo inevitable; la masacre de todas las tropas cristianas, nuevamente las calles de Alcaraz son bañadas con sangre cristiana, otro día triste para los defensores de Cristo.







Atrás quedan las nobles gestas, y los terribles enfrentamientos, solo queda un silencio sepulcral, por las calles de Alcaraz, el frió manto de la muerte y la hambruna se cierne sobre ambos ejércitos.


El Rey Alfonso VIII no esta dispuesto a seguir mermando su ejercito, un asalto que iba a ser fácil y rápido, se ha tornado en una pesadilla, cada día que pasa las tropas mas flaquean y aumenta las posibilidades de que Alcaraz reciba refuerzos de las tierras de Jaén, es hora de encontrar una solución mas diplomática, y aunque a regañadientes de mas de uno de sus consejeros manda una misiva, a Aben Hamet.




Tras largos días de negociación el 23 de mayo de 1213  Aben Hamet sale de su fortaleza y se reúne con el rey cristiano, para entregar la plaza.

El Rey viendo la grandeza de este duro rival, decide que le regresen sus armas y su montura para, que tenga una retirada apropiada,  ademas de asignarle una guardia para que lo custodien hasta tierras moras sano y salvo a el y a su pueblo, pues aunque sean enemigos y de ideologías distintas en el fondo son iguales, dos grandes hombres que siempre han de estar velando por el bien de su pueblo.


¿Y COMO LO VIERON LOS VISITANTES?






martes, 14 de mayo de 2013

RECREACIÓN DE LA BATALLA DE LAS NAVAS DE TOLOSA





EL COMIENZO DE UNA LEYENDA

Toledo, mayo de 1212, lugar y fecha elegida por Alfonso VIII para reunir a la Santa Cruzada. Para evitar roces y problemas con la población civil de Toledo, Alfonso intentó acuartelar a los cruzados extranjeros fuera del casco de Toledo; pero no fue posible. Los tramontanos, acostumbrados a las cruzadas de oriente, asaltaron la judería toledana provocando una masacre y rapiñando el botín.
Alfonso VIII, forzado por la necesidad de estos cruzados para la alianza cristiana, hizo la vista gorda por el bien de la empresa.
20 de julio de 1212; las tropas cristianas salen de Toledo hacia el frente de batalla. El ejército estaba formado por unos 85.000 soldados, al frente con los cruzados extranjeros, don Diego López de Haro, el señor de Vizcaya. Esta era la tropa de choque contra los almohades, la vanguardia del ejército cristiano.
A los pocos día llegaron a la fortaleza de Malagón. Los musulmanes ofrecieron la rendición a cambio de la supervivencia. Pero los cruzados extranjeros negaron cualquier tipo de acuerdo y pasaron a cuchillo y degollaron a los habitantes de Malagón. El rey Alfonso VIII llegó dos días más tarde a la fortaleza y contemplo horrorizado el espectáculo dejado por los tramontanos. Esa no era la batalla que quería el rey de Castilla, había que negociar de otra manera. Empezaron los roces entre los cristianos españoles y los extranjeros.
Días más tarde llegaron a la fortaleza de Calatrava, aquella que habían perdido los Templarios. En esta ocasión Alfonso llegó a tiempo de negociar con los musulmanes y le permitió salir a cambio de no combatir. Esto fue la gota que colmó el vaso y los cruzados tramontanos decidieron abandonar la cruzada y marcharse, los hispanos nos quedamos solos ante el poder almohade.
La deserción de los cruzados extranjeros fue importante para la moral del ejército cristiano, la sombra de Alarcos se le apareció otra vez a Alfonso VIII. Aproximadamente se marcharon un 27 % del total, quedando constituido finalmente, el ejército cristiano, por unos 60.000 hombres. Afortunadamente, al ejército cristiano se incorporó el gran Pedro II de Aragón, el gran amigo de Alfonso VIII. Aragón aportó a la empresa, unos 3.000 caballeros y unos 2.000 soldados. Los reyes cristianos decidieron continuar y combatir.

     Al-Nasir esperaba tranquilamente en la estribaciones de Sierra Morena, con fuerzas preparadas para la emboscada en los peligrosos pasos de Despeñaperros. Esperaba que los cruzados se cansaran por el duro caminar por la sierra.




      Sierra morena era un difícil obstáculo para los cruzados cristianos. El ejército era numeroso y atravesarla no iba a resultar sencillo. Además en los únicos pasos disponibles, estaban emboscados los almohades.


 Los exploradores cristianos trataban de encontrar pasos francos que permitiera el movimiento de tropas sin riesgos; con la fortuna de encontrarse con un joven pastor que los guió hasta uno que él conocía, evitando las furtivas miradas de las tropas infieles. 




 Para entonces ya se había incorporado Sancho VII el rey de Navarra con 200 caballeros y unos 2.000 peones. El paso les condujo hacia un lugar llamado la Mesa del Rey, donde se estableció el campamento cristiano.






Por fin pudieron acampar en terreno alto y ventajoso, la Mesa del Rey.
















En la madrugada del 16 de julio se da la orden de preparar las tropas, hoy sera el gran día. 





COMIENZA LA BATALLA


El abanderado de Castilla, Don López de Haro, ataca frontalmente con las milicias concejiles, contra la vanguardia almohade. Destrozando el frente almohade, estos viéndose superados se baten en retirada.




   En realidad, los almohades no se batian en retirada sino que estaban aplicando una tecnica que tan bien les habia funcionado la " torna fuga ", lo que desorganizo el ataque cristiano y permitio llevarla a una emboscada, superando a las tropas cristianas y debasto al ejercito cristiano.




La segunda linea cristiana se adelató y entró en combate para suplir las abundantes bajas sufridas. 




¡Aguantad....!




La situación era critica, muchos se retitaban, excepto Lopez de Haro, su hijo, Nuñez de Lara y las Ordenes militares, que se mantubieron heroicamente en combate cerrado.




Esto esta terminado


 



 Viendo esto Al-Nasir, creyo tener la victoria de su lado por lo que mando un ataque final con todo el grueso de su ejercito para asi sentenciar la batalla

Compañeros esta sera nuestra ultima gesta


    Mientras tanto en el bando cristiano.
Algo habia que hacer no podian dejar a sus hombres solos, no podian dejar que el Islam se extendiera por toda la peninsula otra vez, no podrian vivir con una segunda derrota, esta vez no, Alarcos no se podia repetir, es el momento de contra-atacar, Dios esta con nosotros.






Alfonso VIII se miro con sus buenos amigos, era el momento. 
Vencer o morir, por la peninsula y por toda la cristiandad.
 Alfonso VIII, Pedro II y Sancho VII se pusieron al frente de sus hombres y de las ordenes militares, y se lanzo la ultima carga la que se conocio como la carga de los tres reyes.

Por Dios y Calatrava ¡Adelante!

Al ver esto las tropas cristianas, perdieron sus dudas, recuperaron su fé, era nuestra hora, el momento de vengar a nuestros hermanos perdidos en Alarcos, aun cansados y malheridos recompusieron las filas y se dio la ultima orden.
 ¡CARGAD...........! 


Los cristianos rebasaron la segunda y la tercera línea almohade






  Una acción heroica de Sancho VII de Navarra, provocó que las tropas navarras se presentaran delante de la majestuosa tienda roja de campaña de alNasir para aplastar a la guardia personal del Miramamolin. 



Un leal al Califa montado en una yegua, se llego a el y le dijo: "¿Hasta cuando vas a seguir sentado?, ¡Oh, Principe de los creyentes!, se ha realizado el juicio de Dios, se ha cumplido su voluntad y han perecido los musulmanes" Entonces el Califa con mirada perdida se incorporó y se dispuso a montar su caballo, pero el arabe descabalgando de su montura le dijo: Montad mi yegua es de pura sangre y no sufre ignomia, quizas Dios os salve con ella, porque en vuestra salvación esta la nuestra.




La guardia negra se había quedado para defender la tienda. Los hombres de Sancho fueron matando uno a uno a los miembros de la guardia y rompieron las cadenas de circundaban la tienda. Esta cadenas pasaría posteriormente la parte fundamental del escudo de Navarra.

Miles de hombres cayeron , pero finalmente la victoria se decantó del lado cristiano. El Califa Miramamolín escapó huyendo a toda prisa una vez perdida ya la batalla. Esa noche se refugió en Baeza.
Los muertos musulmanes 90.000 y 5.000 los cristianos.

   Finalizada batalla, Rada, el Arzobispo de Toledo rezó en el campo de batalla con el ejercito castellano, un "Te Deum" de agradecimiento a Dios.







Así termino esta gran recreación de la madre de las Batallas.






¡Y ASÍ SE VIVIÓ!


lunes, 6 de mayo de 2013

Nuestra Sede



EL SACRO CASTILLO- CONVENTO DE CALATRAVA LA NUEVA



Se halla situado en el cerro Alacranejo dentro del término municipal de Aldea del Rey en la provincia de Ciudad Real (España).


La fortaleza actual tiene 46 000 metros cuadrados, y fue construida por los caballeros calatravos en los años 1213 a 1217, después de la Batalla de las Navas de Tolosa , empleando como mano de obra a buena parte de prisioneros tomados en dicha batalla.


Una vez erigida, se convirtió en sede de la Orden de Calatrava, y en una de las más importantes fortalezas de Castilla. Su historia corre pareja a la de la propia Orden.


Fue construido para sustituir como sede maestral a la ciudad de Calatrava la Vieja, situada más al norte, en la margen izquierda del río Guadiana, lugar donde a mediados del siglo se había fundado esta orden militar.


El castillo pervivió hasta el Siglo XIX, en que fue abandonado tras las desamortizaciones religiosas emprendidas por el ministro Mendizabal para sanear las cuentas estatales en 1835.



DESCRIPCIÓN




Se trata de un complejo recinto compuesto por iglesia, convento, hospedería, puebla y recinto externo, todo fuertemente fortificado. Desde la llanura se asciende a la fortaleza bordeando sus murallas exteriores y se llega una explanada donde se abre la puerta exterior del siglo XV, que permite entrar en el recinto externo o liza que está limitada por dos murallas casi paralelas. 


Este recinto se utilizaba para guardar el ganado, para alojar tropas en tránsito y para refugio de campesinos en caso de peligro.


Desde la liza se accede a la zona del convento por una enorme cámara situada junto a la muralla, semi-subterránea. En esta cámara se situaba el cuerpo de guardia y las caballerizas. Sobre ella se levantaba la hospedería que hoy se halla muy destruida. Al salir de las caballerizas se entra en un espacio defensivo intermedio, que era un lugar de paso. A la derecha se encuentra el convento del que sólo quedan los suelos y parte de los muros.


El camino continúa hacia el castillo cuyos altos muros se levantan ante el espectador. A la izquierda pueden verse diversas estancias semi-subterráneas que se pueden visitar. Se trata de antiguos almacenes, que a su vez ocupa parte de la antigua hospedería. Continuando por el camino, pueden verse enormes rocas cortadas a pico que forman la base de las murallas del castillo y al otro lado una explanada. Desde aquí se domina el recinto de la puebla que conserva las murallas completas por cuyo adarve se puede circular.


En dicha puebla había calles y casas y era donde vivían los servidores del castillo y del convento. Está situada en un gran saliente rectangular de la muralla y tiene sus torrecillas y un portillo de los llamados secretos.


EL TEMPLO


Es de estilo Cisterciense. Tiene un gran rosetón en su fachada, del tiempo de los Reyes Católicos. Los contrafuertes son a modo de torreones. En el interior se ven tres amplias naves cubiertas con bóvedas de ladrillo y tres ábsides con arcos apuntados. En el lado izquierdo había capillas funerarias que luego fueron tapiadas. A la izquierda de la fachada estaba el palomar y el pozo de nieve. Había una entrada desde la liza. A la derecha se encuentra el Campo de los Mártires (cementerio), con su capilla, y también enormes aljibes subterráneos y el camino de subida al castillo.

En la iglesia, estuvo sepultado Alfonso de Molina en un suntuoso sepulcro que se encontraba cobijado por un arco en la Capilla Mayor del templo.


EL CLAUSTRO DEL CONVENTO


Se accede por una puerta de la nave lateral derecha. Quedan vestigios de los soportes de arcadas. Detrás de este claustro hay un paso entre sus muros y los cimientos del castillo por el cual se llega a la primera puerta del recinto del castillo propiamente dicho.

LA FORTALEZA

Se encuentra en el centro y en lo más alto. Su primera puerta, con arco apuntado, funcionaba como barbacana que protegía la segunda puerta a la que se llega tras un recorrido en codo y a cielo raso. La segunda puerta se abre en los muros del castillo y da acceso a una gran caballeriza con bóveda de cañón apuntado, separada del patio de armas por pilares.


Una vez situados en el patio de armas, a la derecha hay una escalera moderna de caracol, de piedra, que accede al antiguo archivo de la Orden. A la izquierda está la entrada de la cámara del Maestre, con la Cruz de Calatrava sobre el arco apuntado. Debajo hay un aljibe. En frente, se encuentra el acceso principal a las dependencias del castillo; se trata de una gran escalera que conduce a diversas cámaras.


Esta escalera conduce a cuatro niveles:


Primer nivel: A la derecha se entra en una cámara abovedada que se comunicaba con el piso de arriba por una trampilla en el techo. Al fondo, por una estrecha entrada se accede a un aljibe. Hay que volver a la escalera para continuar la ascensión.


Segundo nivel: Allí se encuentra una cámara larga y estrecha que estuvo dividida en dos plantas por un suelo de madera. A la segunda planta de suelo de madera se accedía desde la plataforma en que va a desembocar la escalera si seguimos por ella.


Tercer nivel: Esta plataforma era la planta principal. Sólo conserva sus muros y ventanas. Está a 20 m desde el suelo exterior. Desde ella se puede llegar al archivo (cámara abovedada con una ventana que mira al castillo de Salvatierra que está a poca distancia). Por el lado opuesto se llega al último nivel.


Último nivel: Desde aquí se domina todo el recinto. La vista desde la zona de los mástiles es: Al sur se ve Sierra Morena; al este, el castillo de Salvatierra y Calzada de Calatrava.



Información sacada de Wikipedia.

domingo, 5 de mayo de 2013

Uniformidad desde el siglo XII al XV


UNIFORMIDAD DE LAS DIFERENTES EPOCAS.

 S. XII 1164. Es el año de la confirmación papal de la orden calatrava por el papa Alejandro III. La orden toma la regla cisterciense y adopta la cruz latina, de color negro con la flor de lis en las puntas pero sin desarrollar los brazos.

Los ropajes de un freire:

Ropa interior: Calzas, Calzón, Camisola y Crespina

Ropas de armar: Gambesón, Crespina acolchada, 

Protecciones: Brafoneras, Loriga y Almófar

Sobre esto iría el escapulario o habito blanco que en esta época  llevará la capucha cosida a este y la cruz negra cosida al pecho.

Capa del mismo color con cruz cosida en el brazo izquierdo.

Yelmo o capacete.

Escudo, espada y lanza.

Lamina explicativa de vestimenta de un freile templario:







  S.XIV 1397. El 1º de noviembre de ese año, el día de los Santos, Benedicto XIII dispensa a los caballeros de la obligatoriedad de llevar capucha, al tiempo que determina que podían portar la cruz en el lado izquierdo del pecho; el capítulo general de la orden de Calatrava adopta por quórum el cambio de color de la cruz de negro a rojo, en honor a la sangre derramada y a los hermanos caídos en combate contra el islam durante la Reconquista. 




 S. XV 1467 Se confirman los estatutos donde se ratifican las dignidades de la Orden y sus ropajes, aparece la cruz que común mente conocemos.



Dignidades:

 Gran Maestre:

    Autoridad suprema de la Orden Calatrava; Otorgaba las encomiendas, confería hábitos y prioratos. Administraba justicia a todas las personas pertenecientes a la orden, vasallos incluidos. El cargo era electivo y vitalicio. 

  Su ropa interior serán de color negro al ser una Dignidad.

  Escapulario y capa de color blanco, ya no portan capucha alguna.

  Siguen portando la loriga y almófar tal y como se refleja en sus votos.

  Portaran un bastón de Mando

 Comendador:

Encargado de la administración de las encomiendas y villas cedidas por el Maestre; Por encima de estos estaban los Comendadores Mayores de Castilla y Aragón.

Su ropa interior será de color negro al ser una Dignidad.

Portara loriga, almófar; armadura ligera de la época y los colores de sus ropajes serán marrones.
Los caballeros de la orden tenían prohibidos los colores, rojizos, verde claro, pavonado claro y amarillo, ya que se consideraban colores deshonestos.

Clavero Mayor:

Su misión era guardar y defender el Sacro convento de Calatrava la Nueva. También era lugarteniente del Maestre en el campo de batalla; a su vez estaban las subclaverías llevadas por claveros, en las encomiendas. 

Sus ropas interiores también serian de color negro al ser otra dignidad.

Vestían igual que un freile, con la diferencia que en su escudo portan las dos trabas y tres llaves en el cinturón, estas serian las de la puerta principal, la armería y la despensa.

Prior:

Encargado del cuidado espiritual de los caballeros. Representaba al abad de monasterio cisterciense de Morimond.

Sus ropas interiores también serán de color negro.

Este portaba hábito benedictino, como el del Abad Frey Raimundo de Fitero (Navarra).

Aun siendo hombre de fé, también portaba cota de malla y almófar.

Como dignidad eclesiástica portaban el color rojo en el interior del manto.

No portaba armas pero si bastón con cruz guía. 

Sacristán:

   Persona de fé, encargado de la custodia de las reliquias y mantenimiento del monasterio.

Sus ropajes también serán de color negro.

No porta armadura siempre y cuando este dentro del monasterio, el cual rara vez abandonaba.

Sus hábitos también seria benedictino al igual que todos los hermanos religiosos de la orden. 

Freires y Novicios:

 Freire:

    Caballero de la orden, su vida era para servir y proteger a la orden, además de los votos de pobreza, castidad y obediencia tenían el de dormir con su armadura, guardar silencio en el refectorio y ayuno 4 días a la semana, excepto cuando estuvieran en combate.

    Sus ropajes interiores serian de colores marrón o blanco.

Novicios:

  Aspirante a formar parte de la Orden, tendra un minimo de un año para que conozca bien la congregación y tambien que con la ayuda de un instructor o maestro, pueda decidir, libremente hacer los votos o seguir por otro camino.

 Según dicen algunos escritos iban tan bien armados como un caballero con la diferencia de que su espada no era portada a la cintura sino de un cinto cruzado desde el hombro contrario a la cadera de donde se encontraba y sus ropas interiores eran de color blanco.





Breve reseña historica


   La Orden de Calatrava es una orden militar y religiosa, fundada en el Reino de Castilla en el siglo XII por el abad Raimundo de Fitero, con el objetivo inicial de proteger la villa de Calatrava, ubicada cerca de la actual Ciudad Real. Pertenece al grupo de las órdenes cistercienses y en la actualidad únicamente tiene carácter honorífico y nobiliario.

   Su origen se debe a un gesto heroico. La ciudad de Calatrava, junto al río Guadiana, había sido arrebatada a los árabes por Alfonso VII en 1147. Dada la importancia estratégica del lugar como baluarte avanzado de Toledo ante los moros, el rey quiso asegurar su defensa entregándola en 1150 a la Orden del Temple, ya que por aquellas fechas no existían los ejércitos regulares, ni era fácil poblar las zonas de frontera.
   Unos años más tarde, ante el empuje islámico, el Temple dio la empresa por perdida, y devolvió la fortaleza al sucesor de Alfonso, el rey Sancho III.
Ante la situación creada y el inminente peligro, éste reunió a sus notables y ofreció Calatrava a quien se hiciera cargo de su defensa. No hubo noble ni plebeyo dispuesto a tal empresa. Pero sí un monje: Fray Raimundo, abad del monasterio cisterciense de Santa María de Fitero (Navarra) alentado por el monje de su monasterio Diego Velázquez ;Entre la sorpresa y las bromas de los nobles y al no haber alternativa, el rey cumplió su palabra, entregando Calatrava a los monjes de Fitero mediante donación realizada el 1 de enero de 1158 en Almazán.
  Ellos, por su parte, formaron en poco tiempo un ejército de más de 20.000 monjes y soldados, uniendo, a los que había conseguido organizar fray Diego Velázquez en las cercanías de Calatrava y los que había reclutado Don Raimundo en el reino de Aragón. Ante tal multitud, los árabes rehusaron entrar en batalla, retirándose hacia el sur.
   Como el compromiso de defender Calatrava se mantenía y resistiéndose con el tiempo los caballeros a tener por superior a un Abad del Císter y vivir entre los monjes, decidieron elegir un Maestre de la Orden. Los monjes se retiraron a Ciruelos y los caballeros a Ocaña, donde se convirtieron en una Orden militar, la primera hispana, que adoptó el nombre propio del lugar.
   El primer Maestre de la Orden fue Don García, que obtuvo del Císter y del Pontífice Alejandro III la confirmación de la orden y la regla cisterciense otorgada por el Capítulo General mediante bula. Éste documento papal fue expedido el 25 de septiembre de 1164 en la población de Senón, Lorena (Francia oriental), muy cerca de la ciudad de Verdún. Esta regla, modelada sobre las costumbres cistercienses para hermanos laicos, impuso a los caballeros, además de las obligaciones de los tres votos religiosos (obediencia, castidad y pobreza), las de guardar silencio en el dormitorio, refectorio (comedor) y oratorio; ayunar cuatro días a la semana, dormir con su armadura, y llevar, como única vestimenta, el hábito blanco cisterciense con una sencilla cruz negra y aquí es donde comienza nuestra historia ...